Sus colecciones son descritas como elegantes y originales, además de brindar innovación y exclusividad para el hombre actual.

Para que las creaciones del barranquillero fueran catalogadas de esta forma, Sonen tuvo que recorrer un largo camino que ha dejado como legado 17 años de buen vestir y gusto exquisito.

La carrera de Jon comenzó en 1998 cuando decidió a dejar su vida como comerciante y se enfocó en vestir en la moda masculina.“Me dediqué a estudiar gerencia de productos, marketing empresarial y especialmente me metí dentro del mundo de las confecciones para conocerlo de lleno. No fue fácil. Siempre hay miedos y personas que te dice que para qué lo haces, pero una vez das el paso te das cuenta de que todo salió como lo esperabas”.

Jon Sonen es un hombre que no le tiene miedo a los cambios o retos. Los enfrenta siempre con la cabeza en alto y con un as bajo la manga: su creatividad.

Desde 1998 diseña para hombres siendo el lino su principal material para desarrollar sus prendas. Comenzó con un pequeño taller en su casa, ubicada en el norte de Barranquilla y ahora tiene su propio emporio compuesto por más de 1500 empleados y con tiendas de moda en capitales como Barranquilla, Bogotá, Medellín, Montería, Cartagena, Santa Marta, Valledupar, Villavicencio, Neiva, Cúcuta, Cali y Yopal.

Además de dominar el territorio nacional, Jon posee tiendas en Venezuela, República Dominicana, Estados Unidos, Puerto Rico, Curaçao y México. “Cuando tú tienes un buen producto que ofrecer y la calidad prima, tu propuesta se va lejos”, dijo.

Con sus colecciones ha participado en ferias nacionales de moda como Colombiamoda, Caliexposhow y Plataforma K, y en espacios internacionales como Intermoda, en México; Magic Show y Market, Project Show, en Las Vegas y CPM Moscow, en Rusia.

Jon no solo es el amo y señor de las prendas masculinas en Colombia, también demostró que un hombre va más allá de una camisa, pantalones y zapatos. Conjunto con su línea de ropa, también está su propuesta de complementos la cual abarca desde calzado y marroquinería, hasta accesorios, bolso, billeteras, corbatines, sombreros gafas, medias, entre otras creaciones. “Mi filosofía es mostrarle a mis clientes que siempre hay algo más y hay diferentes formas de verte diferentes y enmarcar el estilo”, agregó.

El hombre detrás del diseñador

Jon se define como una persona que todo el tiempo está aprendiendo. La capacidad para ver más allá de lo obvio la heredó de sus padres, quienes le inculcaron que los límites son puestos por uno mismo. “Mi educación fue fundamental para crear esta industria. Me enseñaron a creer en mí, en las personas, y a cumplir todas las metas”, explicó.

Cuando busca la inspiración, no duda en tomar un transporte e irse al fin del mundo para dar con la que busca. Para su última línea primavera – verano 2015, Sonen se fue a España y se inspiró en el color, los atardeceres y el encanto de la madre patria.

En su tiempo libre descansa, visita a su familia, sale con sus amistades y vive una vida normal.

El padre que viste al hijo

Desde el 2014, Jon explora el terreno infantil y comenzó a diseñar para los niños. “Nos ha ido muy bien en este terreno y continuaré diseñando para los más pequeños. Mi objetivo es que el padre vista al hijo y que el niño quiera ser como su progenitor cuando llegue a la mayoría de edad”, visionó.

El imperio sigue creciendo

El proyecto 2015 para Jon es abrir en Cartagena una casa de moda integral, donde los visitantes encuentren desde prendas de vestir, complementos, asesorías, entre otras opciones. Se tiene previsto que esta idea vea la luz en agosto de este año. Aunque el diseñador de 40 años de edad, prefiere guardar silencio hasta que no se concrete lo que tiene en mente.

De esta forma, Jon Sonen se muestra como un hombre camaleónico, de retos y que no teme innovar. Su vida se rige entre la creatividad, la responsabilidad y el amor por lo que hace.